viernes, 14 de octubre de 2011

Un Momento de Tristeza


 

Tomada en Oaxaca
 
             Quiero saber si estos lugares algún día se acordarán de mí, si las páginas de los libros que he leido se les plasmará mi imagen, si la cuchara sentirá mi mano, si el piso conservará mis pisadas, si  las iglesias recordarán mi nombre. El nombre que resonaba por su insolencia e impulsos. Quiero saber si el suelo guardará el ruido de mis pasos, si el aire conservará mi aroma. Pero más deseo saber si algún día saldré de la duda eterna, si Dios dejará de ser concepto y será el más puro Amor en mi corazón, si dejaré de soñar y asentaré mis ideas en la tierra, si mi mente incomprendida se jactará de conocimiento o terminará en un manicomio, quiero saber si tendré el valor de enfrentar la realidad o seguiré ocultándome detrás de estas líneas.

            La tierra nunca pueda odiar al árbol, a veces somos demasiados pequeños para la vida que es muy grande, pero somos demasiado grandes para el mundo que el muy pequeño. Un  mundo lleno de ideas, pasiones, desilusiones, problemas, catástrofes.... el árbol debe agradecer a la tierra pues le da la vida, le da  el sostén para que eche raíces firmes y pueda crecer, pueda extender sus ramas de ilusión y anhelos de éxito.
 
     La amarga vida se ha marchado, ahora inicia un nuevo horizonte, una hoja en blanco y entre nuestros dedos yace una pluma con tinta divina para que escribamos el libreto de nuestra felicidad. Las balas perdidas sirven para ver el desorden, para destrozar todo, para cambiar los planes, para ver las fallas en el árbol y asi podarlo a manera de lograr una belleza enaltecida.

        Morimos después volvemos, debemos sonreir cuando estamos mal, cuando por dentro queremos morir, necesitamos controlar nuestros impulsos, nuestro orgullo del yo quiero tener la copa más alta, urge ser dócil y humilde, hacer  a un lado nuestros miedos enfermizos que lastiman a los seres  lo que más amamos.   

              La vida perfecta  nunca esta en nuestras habitaciones hay que salir a buscarla a las calles, a las iglesias, a las escuelas..., lo único que tenemos en nuestra habitación es el plan perfecto para  alcanzarla (conocimiento). El quiero saber ... es  prioridad en la vida; sólo  aseguraremos nuestro "yo quiero saber" si desde hoy, en este instante, en este minuto, en estas circunstancias, en este espacio decido y ordeno a los lugares  recuerda que eres bello porque me admire al verte; a los libros plasma mi imagen en tu hojas por todos esos días de desvelo por dedicarte tiempo al meterte en mi vida y emocinarme tanto con tus letras; a la cuchara siente mis manos pues sin ellas eres sólo un objeto inerte; a los pisos  conserva mis pisadas porque  porque en ellas descansan el caminar de un soñador, al aire  encarcela mi aroma pues así  no solo te sentirá sino ahora tendrás personalidad,  y a todo lo demás a las iglesias, murallas, estatuas recuerden mi nombre pues soy el más grande ejemplo de soberbia, inseguridad, y estupidez para puedan advertir a aquellos que amo que la vida es mejor cuando eres real y dices  la verdad de manera educada. Pues nuestro conocimiento se opaca cuando hablamos de manera repugnante.

          Morimos después volvemos siempre es asi. Aunque no podemos regresar en el tiempo e iniciar  si podemos corregir y presumir de nuestros errores, para iniciar evitando faltas y siendo pulcros en nuestro actuar.

        Los grandes conflictos son a causa de falta de palabras efectivas o no???



No hay comentarios:

Publicar un comentario